jueves, agosto 31, 2006

Ave fénix. Ave Moderno.

Sonado en mi cabeza: Besos (El canto del loco)
Hey, atiende, por qué
has salido a la calle tú tan fresco.
Y dime por qué
te has tirado tres horas en el espejo
pa ponerte guapo pa ligar,
para ir a la calle y no piensa
sque eso ya da igual.
Que ya no vas a impresionar,
que lo bueno y lo que importa está en los besos.
Y eso es lo que quiero, besos.
Que todas las mañanas me despierten de esos,
que sea por la tarde y siga habiendo besos.
Y luego por la noche hoy me den más besos pa cenar.
Y dime por qué
tú hoy te echas mil cremas por el cuerpo,
si no se te ven.
Y se te han olvidado los sentimientos.
Tienes que empezar por resolver.
Lo que tienes dentro
y no piensas casi en los demás,
qué más dará si mal o bien.
Mucho metrosexual y faltan besos.
Y eso es lo que quiero, besos.
Que todas las mañanas me despierten de esos,
que sea por la tarde y siga habiendo besos.
Y luego por la noche hoy me den más besos pa cenar.
Y luego por la noche hoy me den más besos pa cenar.
Y párate a ver,
que los que ya te quieren no miran eso.
Sólo quieren ver ese guiño de ojos
sin complejos.
Después de medio año con el moderno abandonado, me voy a poner ñoño. Y lo voy a hacer con brevedad, como un paso necesario que dar a toda prisa. Para no caer luego en ese sentimentalismo vacío que siempre he detestado de la blogosfera.
Lo hago para dar las gracias. Gracias a quienes han mantenido en la distancia eso (fuera lo que fuere) que teníamos hace ya meses, que incluso lo han mejorado. Gracias a los que han llegado para quedarse, para hacer juntos pequeñas grandes cosas en nuestras humildes vidas. Y decir adiós a los que ya no van a participar de la mía.
Dicho esto, anunciaros la vuelta del Moderno, esperemos que mejorado, desde luego remodelado. Prometo no escribir nunca más una entrada como esta. Por que hay que ser absolutamente modernos, y para ser moderna hay que ser chaquetera.
La canción de hoy carece de cualquier excusa de la que pueda salir airoso. Solo puedo decir que si bien excusa hay, carece le toda lógica racional (que esa de la que yo también carezco) Siendo así, espero que sepáis perdonarme que alguna vez El canto del loco pueda sonar en mi cabeza. Yo no sé si prodría perdonaroslo a vosotros. Sed más generososos que yo, anda.
Prometo de nuevo. No volveré a caer nunca más en la radiofórmula barata.
Palabra de Moderno.