miércoles, diciembre 14, 2005

Quédate en el centro de la Tierra.

Sonando en mi cabeza: 60 miles an hour (New Order )
I don't know if I told you/ but I'm seeking sanctuary
You'll never guess/ the things that I do
I'll have the devil round for tea
Don't you know that I'm here beside you
Can't you see that I can't relax
When I saw you in my rearview
You could've stopped me in my tracks
I'll be there for you when you want me to
I'll stand by your side like I always do
In the dead of night it'll be alright
'Cos I'll be there for you when you want me to
You can take me to an island/ ride across the stormy sea
We can worship pagan idols/ there together you and me
Why don't you run over here and rescue me?
You can drive down in your car
Why don't we both take a ride and turn that key
We'll drive at 60 miles an hour
El calentamiento global no mola nada. Eso dicen por todas partes; en el telediario de Prats y en el de Gabilondo, en la tertulia de la Campos y en la de Ana Rosa. Lo dice el País y lo dice la Razón, el gobierno de China y el de España.
Yo de vosotros me apuntaba ya mismo a decir no al calentamiento global.
Claro que yo no lo pienso hacer, por que hoy estoy frívolo y no me importan en absoluto los icebergs fundentes del Ártico, ni el protocolo de Kyoto, ni la desaparición de la costa valenciana.
Con este constipado perpetuo en el que vivo, me defeco yo en el control de emisiones gaseosas, invoco al calentamiento global y espero sentado en mi sofá viendo los 4400 a que llegue ya el prometido verano eterno.
Lo admito. Esto me convierte en un ciudadano incívico y peligroso, pero confesaré que no me preocupa ser tal cosa. Reivindico mi derecho a ser irresponsable y exigir la muerte del planeta para mi propio beneficio.
Cierto que esto no será una innovación, ya sabéis que el moderno es el primero en copiar. Yo ya ando tarde, estando plagado esto desde hace ya mucho tiempo de criminales con vidas ejemplarmente fabulosas a los que siempre quise imitar.
Hablo de multimillonarios despóticos que hunden países enteros en la miseria, a veces hasta debajo de nubes tóxicas o perpetuas radiaciones; de dirigentes obsesionados en fabricar peligrosas quimeras, que no dudan en masacrar pueblos enteros y reprimir con armas cualquier conato de abolición de su pensamiento único.
Me pregunto yo si mi irresponsabilidad no me convierte en realidad en un ser ejemplar frente a aquellos que disfrutan destruyendo millones de vidas ajenas. Hay cosas que ni un moderno puede copiar.
Hoy, frívolo como ando, he tenido el descaro de poner de fondo a esta entrada a uno de los grandes grupos electrónicos de todos los tiempos. Esto puede ser muy discutido, claro. Tanto que New Order sea uno de los grandes, como que su música pueda llamarse electrónica. Discutidlo si queréis, pero yo opto por asumir ambas cosas.
Hace ya muchos años que estos británicos andan fabricando auténticos bombazos pop, melodías fuertes y pegadizas y letras que hablan del amor y la vida. Pop en estado puro, los New Order.
Hubo un tiempo en que cantosas disgregaciones internas hicieron desaparecer al grupo para convertirlo en un conjunto legendario. Quizá el regreso fue un error, eso es lo que opinan muchos críticos y criticones de profesión. Los mismos que dan su beneplácito a desgastados e insoportables cincuentones del rock.
Solo alegaré en defensa del regreso de los New Order (salpicado de continuos y repetitivos recopilatorios) que bajo ese nombre es difícil que lleguen a construirse temas mediocres, que solo es posible que se den a luz temas fabulosos como este, de hace ya unos años, eso sí.
Y es que 60 miles an hour lo tiene todo para ser una perfecta melodía pop, ritmo, melodía y letra.
Yo me descubro ante New Order. Alabados sean.

12 comentarios:

Alex dijo...

pusiste una foto de los milicos chilenos!
es que venía a decir por aquí que ya tengo un nuevo blog

Alex dijo...

tu cerdo verde está increíble

Anónimo dijo...

el egoísmo es el primer requisito para salir en los libros de historia :P
y arriba New Order!

Anónimo dijo...

Con los New Order me pasa una cosa; reconozco su influencia y me molan hitazos suyos cantidad; sobre todo Crystal y Blue Monday, pero sus primeros discos me suenan como muy anticuados, seguramente porke no los escuché en su momento.

Dan Davenport dijo...

1. De New Order sólo conozco un par de canciones y la verdad es que no me desagradan

2. Muy mal me parece lo que opinas del calentamiento global... que te importa una mierda. Una cosa es no tener conciencia social -como yo- y otra bien distinta desear el verano eterno... te mato... al menos dejémoslo en primavera eterna.

3. Peor aún me parece que en tus montajes fotográficos siempre lo escribas todo en inglés (y te lo dice uno cuyo último post se titula "Girls"...)

Besos, nene... nos vemos ya sabes por dónde ;)

Unknown dijo...

Pues yo debo ser un poco memo: Reciclo, intento gastar poca agua, tiro las pilas en los contenedores de pilas, enseño esto con infinita paciencia a Lucas, vamos que estoy perfectamente adpatado al mundo ecologico que nos ha enseñado nuestra sociedad. Seguro que luego compró productos fabricados con agentes peligrosos que producen contaminación en paises tercermundistas o que mis ahorros sirven para financiar la explotación de crudo en Venezuela. Soy memo.

Anónimo dijo...

No te engañes chato, tú no sobrevivirías ni de coña a un verano eterno. ¿Qué harías? ¿Ir en tanga por la calle?

Anónimo dijo...

Y con lo poco que te gusta mostrar tu cuerpo...

Lope De Rueda dijo...

Lo poco que qué?
Nuka, nena, no vayas por ahí hundiendome, perra.

E. dijo...

Ay, Moderno, me encanta, en este post tb se aprecia esa dicotomía de la que ya hemos hablado en incontables ocasiones. Estupendo.

Anónimo dijo...

hundiéndote? pero qué tiene de malo no querer mostrar el cuerpo de uno?

ciudadano intermitente dijo...

new order, buenisimo viejo.

el calentamiento global? me preocupa el global calentamiento y la crisis de los loser-amantes.

es serio.

nos leemos.